Como la mayoría de vosotros conocéis, la Dirección General de la Función Pública ha publicado la lista provisional de aprobados de la Promoción Profesional Específica, para acceder a la Categoría de Auxiliar de Control e Información; cuyo número de plazas no cubre ni siquiera el número de vacantes existentes en la Consejería de Educación.
Una Promoción que fija su criterio selectivo sobre Formación Específica, dirigida hacia aquellos aspirantes que han tenido la opción de realizar Cursos de Formación, y así lo denunciamos públicamente en el momento que tuvimos conocimiento de las Bases.
Tampoco es una novedad decir que los cursos de Formación los imparten los sindicatos por delegación de la Administración a cambio de dinero contante y sonante. Y, en consecuencia, no resultan novedosos los nombres y apellidos que aparecen en los primeros puestos de la lista de aprobados.
Seguimos pensando que todos los Sindicatos deben rechazar la partida presupuestaria concerniente a dar los cursos de formación a los Empleados Públicos, porque a la hora de negociar con La Administración siempre han sido y serán rehenes de las mismas.
Pensamos que es una Promoción hecha a medida de unos cuantos, al considerar que el acceso a la Formación Específica no cumple el Principio básico de Igualdad para todos los interesados. Seguidamente, deja en estado de indefensión a la mayoría de los aspirantes que han solicitado cursos de Formación y no se lo han concedido, así como a todos los que ni tan siquiera han tenido la oportunidad de poder solicitarlos, ante las presiones y la negativa de las Direcciones de los Centros a dar la conformidad para dichos cursos, y así lo denunciamos públicamente en Mayo de 2008, cuando solicitamos a Función Pública que se suprimiera el anexo II del baremo del concurso; el apartado de la Formación Especifica, de la Orden de 8 de mayo de 2008.
Queremos reiterar nuestro desacuerdo al mismo y reprochar a Función Pública, en calidad de Jefatura Superior de todos los Empleados Públicos, la legitimación de este procedimiento. Pues, a través del mismo consolida el perjuicio ocasionado a la inmensa mayoría de los aspirantes a esta categoría.
En conclusión, una irregularidad paritariamente interesada que discrimina y deja en indefensión a la mayoría de los afectados.
